Un grupo de agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) han generado diferentes reacciones positivas por su gesto solidario con una pareja de ancianos residentes del municipio de San Alejo, en el departamento de La Unión.
Hace algunos días, durante sus patrullajes, conocieron sobre las condiciones de extrema pobreza y abandono en la que viven dos ancianos, en diferentes lugares de esa jurisdicción, y decidieron llevarles alimentación y otros productos de la canasta básica.
El gesto de bondad se apoderó de estos policías del puesto de San Alejo, probablemente recordaron a aquellos seres que les dieron la vida, cuando vieron a don José Donato Joya, de 88 años, en el interior de la humilde vivienda ubicada en el caserío La Barahona, cantón Las Queseras, con mucha necesidad por delante, por lo que, haciendo una pausa en sus tareas operativas, llegaron para hacerle compañía y conversar con él.
Al continuar con su labor de patrullaje en esos cantones para brindar seguridad a sus pobladores, la unidad policial se encontró con Angela Prudencio Ávila, de 85 años, en el barrio Gaspar, quien, al igual que don José, vive en condiciones de suma pobreza.
Conmovidos por tanta necesidad y, claros de su actuación, deciden, de nuevo, unirse para llevar los productos básicos y suplir en alguna medida una de las principales necesidades de Angela.
La mujer no pudo más que sonreír como una muestra de agradecimiento ante aquellos policías que llegaron a su casa para compartir alimento y compañía.
Ambos octogenarios aseguraron que no se alimentan bien ante la falta de condiciones.